Milei canceló una cumbre con Macron, en el momento de mayor relevancia mundial del francés
INTERNACIONALES07/06/2024 RedacciónJavier Milei suspendió sin un argumento claro la cumbre que iba a tener la semana que viene con Emmanuel Macron en Paris, que se iba a convertir en la visita de Estado más importante desde que asumió la Presidencia.
El momento era inmejorable: Macron viene de consolidarse como el líder de Europa y el segundo presidente más importante de Occidente, en un impresionante acto que compartió con Joe Biden en Normadía, donde con la excusa de recordar el Día D, anunció un apoyo militar sin precedentes a Ucrania para que enfrente a la Rusia de Putin.
La decisión dejó en shock a la canciller Diana Mondino, que trabajó con esfuerzo para lograr que Macron acepte recibir a Milei en el día que podía el libertario, que durante esas negociaciones se negó a cambiar la fecha.
El encuentro estaba previsto para después de la cumbre del G7 en Italia que se realizará entre el 12 y el 15 de junio y contemplaba una nutrida agenda de negocios con empresas que invirrten o están interesadas en invertir en la Argentina. Francia es un inversor muy importante en el país en negocios estratégicos como el gas y pretende desembarcar fuerte en la explotación del litio.
Para cerrar esta cumbre, la primera con un presidente realmente importante a nivel mundial, la canciller Mondino tuvo que ablandar los recelos del gobierno de Macron, en el que no pasó desapercibido el encuentro que Milei compartió en Vistalegre, Madrid, con la ultraderecha anti europeísta, incluida la francesa Marine Le Pen, gran rival del presidente de Francia. Lo hizo además en las puertas de una elección clave para el Parlamento europeo, que tiene en Macron el mayor defensor en la continuidad del bloque.
La excusa de Cancillería para suspender el encuentro, que fue comunicado recién este jueves al gobierno de Macron, fue que eran demasiados días para estar ausente del país, algo que no se sostiene porque pocos días después Milei regresará al viejo continente para recibir un desconocido "premio" de la Fundación Von Hayek, en otro viaje privado costeado con fondos públicos.