Milei negocia el apoyo con los gobernadores

El Gobierno nacional, frente a una ofensiva opositora en el Congreso que busca aprobar medidas de gasto significativas, invitó a los mandatarios provinciales a participar de la vigilia por el Día de la Independencia en San Miguel de Tucumán, en un intento por negociar apoyos que permitan blindar un eventual veto presidencial.

La convocatoria, que se produce justo un año después del "Pacto de Mayo", busca mitigar el impacto fiscal de los dos proyectos presentados por los gobernadores que, según el Ejecutivo, pondrían en riesgo el equilibrio de las cuentas públicas. La Casa Rosada minimiza la preocupación por la avanzada legislativa, afirmando que "no preocupa y, de hecho, no es la primera vez que pasa". Sin embargo, voceros oficiales insisten en que todavía hay tiempo para negociar con gobernadores del espectro dialoguista y asegurar el respaldo necesario para un veto presidencial, en caso de que los proyectos avancen en el Congreso.

Los proyectos que preocupan al Gobierno incluyen el aumento de las jubilaciones, la declaración de emergencia en discapacidad y reformas para que las provincias reciban más fondos, como la regulación del reparto de los Adelantos del Tesoro Nacional (ATN) y la coparticipación del impuesto a los combustibles líquidos.

La ofensiva de los gobernadores se explica por los "incumplimientos" por parte del Ejecutivo en sus demandas para mejorar la distribución de fondos y la ejecución de obra pública ya pactada. Previamente, el Ministerio de Economía había cerrado las conversaciones con las provincias al considerar que las medidas reclamadas ponían en riesgo el superávit fiscal. La invitación formal a los mandatarios provinciales es para la vigilia del Día de la Independencia, que se realizará a la medianoche del martes 8 de julio en San Miguel de Tucumán.